Pensar que fui alcalde en la capital,
gobernador de toda mi provincia
hasta el último día de sol
luego…
qué fácil es perderse,
perderse sin motivos
cuando un beso no dura para siempre
y el mundo se hace cada vez más pequeño con la verdad;
cuando la Latinoamérica violada de mis abuelos me devuelve la bofetada;
cuando ya no queda tinto que aguante ni copa sin cicatriz;
cuando vamos contra el natural modo de proceder
y todo por las promesas rotas;
que pena
no pude mostrarle a Soledad que su nombre estaba equivocado;
desojé a Margarita;
Catalina ni es reina, ni es incapaz de engendrar
y Gulnara… Gulnara es un nombre muy raro.
por Ad Sum
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